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Sobre el Ataque de Pánico en Costa Rica
En esta ocasión queremos profundizar en torno al “Ataque de Pánico en Costa Rica“, teniendo en cuenta que es una problemática que puede aparecer en personas de todas las edades, generando altos niveles de angustia en quienes los padecen, como en quienes están a su alrededor. Estos episodios suelen generar inseguridad y miedo a que vuelvan a presentarse, debido a la intensidad de las sensaciones que se viven en el momento.
Ahondar en el tema del ataque de pánico en Costa Rica, es necesario para que las personas puedan tener las herramientas necesarias para enfrentar este tipo de casos, y para que puedan saber que la Terapia Psicológica es un recurso fundamental para trabajar las crisis de angustias y aliviar los síntomas, sin tener que recurrir a tapar la problemática con medicamentos que no trabajan en la raíz principal del problema.
“La angustia sería algo real para el sujeto, así también su razón.”
En este artículo profundizamos en torno al Ataque de Panico en Costa Rica o Crisis de angustia, con el fin de explicarte: ¿Qué es un ataqué de pánico?, ¿Cuáles son los síntomas de un ataque de pánico? y ¿Cuáles son las características de un ataque de pánico?, para desembocar en cómo se trabaja en la terapia para ataque de pánico y otra información importante que puede salvar vidas.
Sabemos que padecer o ser testigo de un ataque de pánico puede ser bastante angustiante, principalmente porque las personas no saben cómo abordarlo y puede resultar en un episodio traumático. Es por esto que informarse sobre este tipo de problemáticas es un acto de responsabilidad frente al cuidado de nuestra salud mental.
¿Qué es un Ataque de Pánico?
El significado de Ataque de panico es extraído del DSM (Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales), y se encuentra referenciado en en el capítulo de Trastornos de ansiedad, que incluye Crisis de angustia (“panic attack“) y Trastornos de angustia (o “panic disorder“).
Así, se puede observar que el concepto dominante es “trastorno” de ansiedad, el cual se asocia directamente a la ‘angustia‘, tema que ocupa un lugar importantísimo en la psicología y el psicoanálisis.
Si tomamos la palabra “trastorno”, pareciera que estamos ante cierta conceptualización que se mide a partir de algún patrón de “normalidad“, de lo anterior se infiere que ¿estar angustiado nos coloca en la a-normalidad con respecto acierta adaptación?, pues no, no es así, es una condición relacionada con los acontecimientos de la vida, y a la mayoría les pasa o puede pasarles en algún momento.
Por su parte, la palabra ‘ataque‘, es más simple de resolver, si tenemos en cuenta que alude a:
“Una persona o cosa que se nos viene encima para dañarnos, doblegarnos, vencernos o aniquilarnos”.
Y ‘pánico’, nos remite a una situación de:
“Descontrol casi total, en el cual estamos totalmente a merced, casi al borde de la desesperación, debido a que sentimos que nuestra vida pende de un solo y débil hilo”.
Como puedes observar, las anteriores conceptualizaciones resultan siendo bastante impactantes, y pueden parecer incluso un callejón sin salida.
Existe entonces una segunda intención en la denominación de este “mal”, pues estos títulos tan alarmantes, evidencian una situación que indica un límite, y arroja una urgente y desesperada llamada hacia las manos de algún profesional o medicamento farmacológico, que pueda detener semejante precipitación hacia la “muerte”.

Es decir, encontraremos rótulos ‘inminentes‘ que generan una urgencia, las cuales son plantados en el origen de una concepción que pareciera algo mercado-lógicamente mortal. Esta mercantilización de la salud, puede resultar contraproducente, sobre todo si tenemos en cuenta que el uso reiterado de fármacos alivia temporalmente la angustia, pero dejando su margen de aparición latente, pues es necesario trabajar con la raíz del problema, con el fin de que los pacientes puedan comprender a qué se enfrentan y lograr soluciones más definitivas que les ayuden a tener una mejor calidad de vida.
A la luz de todo lo anterior, después de analizar la expresión “Ataque de pánico en Costa Rica” desde una perspectiva científica, te contaremos en términos más sencillos de qué hablamos,cuando hablamos de Ataque de pánico en Costa Rica.
Qué es el Ataque de Pánico en Costa Rica: Un Abismo
El El Ataque de Pánico en Costa Rica es un estado de angustia que parece surgir de un abismo, puesto que en apenas un segundo, se produce una situación displacentera que requiere ser calmada apresuradamente, debido a la intensidad de sus síntomas, y de allí que muchas personas intenten rehabilitarse lo más rápidamente posible.
El ataque de pánico en Costa Rica, como su nombre lo indica,es un ataque repentino de miedo y angustia con una duración de varios minutos, que puede incluir sensaciones físicas como taquicardias, sudoración y respiración entrecortada. Uno de los rasgos más característicos de este tipo de episodios, es que las personas sienten que van a morir , lo que hace que el pánico crezca.
Otro de los rasgos importantes, es el miedo a que algo horrible vaya a suceder, aunque no existan estímulos o situaciones que puedan motivar esta sensación de peligro inminente. Dentro de un ataque de pánico en Costa Rica, también se da un miedo generalizado a perder el control o a sufrir un ataque al corazón, debido a las sensaciones físicas que acompañan el episodio. Cabe resaltar que este tipo de ataques de pánico en Costa Rica, pueden suceder en cualquier momento y darse de modo repetido, lo que genera mayor angustia en las personas, pues tienen la sensación de que en cualquier momento volverá a suceder.
En la gráfica anterior, podemos ver el ciclo de un ataque de pánico en Costa Rica o crisis de angustia, con sus momentos más representativos, es por eso que muchas personas desde la primera etapa ya saben qué se avecina y con las herramientas adecuadas pueden estar más preparadas para enfrentar este tipo de episodios.
También consideramos que es importante hablar de la discrecionalidad clínica de quien diagnostica e inicia el tratamiento del Ataque de Pánico en Costa Rica y sus crisis de angustia, teniendo en cuenta que más allá del diagnóstico, es necesario recurrir a una intervención terapéutica efectiva, que se adapte a las necesidades reales del paciente.
En este punto vale la pena preguntarse si el Ataque de Pánico en Costa Rica se aborda ¿desde una posición médica o psicológica al respecto del sufrimiento del paciente y desde una plataforma teórica que lo sustenta? En este sentido una obturación inmediata y a largo plazo del síntoma, o bien, desde:
¿la que trabaje y finalice con el abismo a mediano plazo?.
También es de vital importancia preguntarse, en cuanto al ataque de pánico en Costa Rica, si ¿Es corporal o existencial la angustia?. Todo esto teniendo en cuenta que, si de algo estamos seguro los analistas es de que: la angustia es un afecto que no miente, y que puede ser trabajado sin la necesidad de medicarse 5, 10 o 20 años. Tener en cuenta esto es súper importante, porque además de que permite generar un diagnóstico adecuado, también abre la posibilidad de definir una dirección de la cura acorde a la sintomatología del paciente.
El Ataque de Angustia, desde Freud
Los síntomas descritos como “ataque de panico” en el DSM, están tempranamente descritos por Freud en uno de sus primeros textos de 1894, al cabo de justificar la separación de la neurastenia (enfermedad de los nervios) o el síndrome en calidad de “angustia“, en dónde describe un cuadro –de Neurosis de angustia– que corresponde a la clasificación general de las Neurosis actuales y es perteneciente a la denominada Primera Nosología (Neuropsicosis de defensa).
Este primer entendimiento psicopatológico freudiano de 1894-1900, sobre la angustia, se define de la siguiente manera.
“(…) Llamo «neurosis de angustia» a este complejo de síntomas porque todos sus componentes se pueden agrupar en derredor del síntoma principal de la angustia; cada uno de ellos posee una determinada relación con la angustia (…)”.
Posteriormente Freud despliega una sintomatología clínica.
Síntomas del Ataque de Pánico (angustia):
1. Irritabilidad general
2. (…) Expectativa angustiada es el síntoma nuclear de la neurosis (…) aquí está presente un quantum de angustia libremente flotante
3. (…) El estado de angustia, que se mantiene las más de las veces latente para la conciencia, pero en continuo acecho (…)
4. Un ataque de pánico puede consistir en:
- Sentimiento de angustia solo, sin ninguna representación asociada
- O bien, mezclarse con la interpretación más espontánea, como: la aniquilación de la vida, «caer fulminado por un ataque», o bien, la amenaza de volverse loco (…)
- Por último, si no se trabaja a tiempo, se conecta con otro miedo, la sensación de angustia con la perturbación de una o varias funciones corporales: respiración acelerada, actividad cardíaca elevada, inervación vaso motriz, actividad glandular
- De esta combinación, el paciente destaca en la mayoría de los casos, un factor, o el otro: se queja de «espasmos en el corazón», «falta de aire», «oleadas de sudor», «hambre insaciable», etc.,
5. (…) Un hecho interesante y de importancia diagnóstica, es que la medida de la mezcla de estos elementos varía enormemente en el ataque de angustia (…)
Otros ejemplos de síntomas en el ataque de pánico son:
- (…) Se acompaña de perturbaciones en la actividad cardiaca, palpitaciones, arritmia breve, taquicardia persistente, hasta llegar a estados graves de debilidad del corazón que no siempre son fáciles de distinguir de una afección cardiaca orgánica; (…)
- (…) A la vez, acompañados por perturbaciones de la respiración, varias formas de disnea nerviosa, ataques semejantes al asma, etc.
- Ataques de sudor, a menudo, nocturnos
- Ataques de temblores y estremecimientos, que es muy fácil confundir con ataques histéricos
- Ataques de hambre insaciable, a menudo conectados con vértigos
- Diarreas que sobrevienen como ataques
- Ataques de vértigo locomotor
6. (…) Terror nocturno, acompañado de angustia y disnea, etc
7. Vértigo, «mareo», «ataque de vértigo»; que puede estar subrogado también por un ataque o desmayo (…)
8. Fobias típicas, referidos, el primero, a las amenazas fisiológicas comunes, y el segundo a la locomoción. (…) Otro grupo contiene agorafobia con todas sus variedades colaterales, caracterizadas en su conjunto por su referencia a la locomoción (…)
8. Perturbaciones de la actividad digestiva como ganas de vomitar, náuseas, y el síntoma del hambre insaciable, con inclinación a la diarrea (…)
Posteriormente, Freud, iniciará al despliegue de posibles causas (II. Producción y etiología de la neurosis de angustia y III. Esbozos para una teoría de la neurosis de angustia, 1894) o su etiología.
Es decir, despliega la psicopatología del cuadro propuesto y ofrece explicaciones de origen:
(…) uno halla como factores de eficiencia etiológica una serie de nocividades y de influjos que parten de la vida sexual. (…) Esta etiología sexual de la neurosis de angustia se comprueba con frecuencia tan abrumadora que me atrevo a eliminar, a los fines de esta breve comunicación, los casos de etiología dudosa o de otra clase (…)
Concluyendo provisoriamente:
- Puede tratarse de acumulación de excitación
- La angustia está en la base de todos los fenómenos que se producen en esta neurosis y no tiene ninguna derivación psíquica
- Adjudica como causas al coitus interruptus
- En muchos casos la neurosis de angustia se conjuga con el más nítido aminoramiento de la libido sexual, del placer psíquico
(…) se trata de una acumulación de excitación; que la angustia, correspondiente probable de esa excitación acumulada, es de origen somático, con lo cual lo acumulado sería una excitación somática; y además, que esa excitación somática es de naturaleza sexual y va apareada con una mengua de la participación psíquica en los procesos sexuales‑, todos estos indicios, digo, favorecen la expectativa de que el mecanismo de la neurosis de angustia haya de buscarse en ser desviada de lo psíquico la excitación sexual somática y recibir, a causa de ello, un empleo anormal (…)
En estos conceptos de Freud observamos que:
La angustia no está estructurada como un síntoma, si bien él señala a la angustia como “el síntoma alrededor del cual…”, en concreto, no tiene lo que hoy llamaríamos una estructura de metáfora (de retorno de lo reprimido), en especial tomando en cuenta el momento en que escribe este artículo y los desarrollos posteriores del tema.
Esto lo confirma:
- Que la descripción de síntomas que realiza Freud no es producto de una ecuación simbólica, no es una significante reprimido que retorna
- No se tramitaría mediante la palabra, su origen es actual y no surge nada respecto a la historia del propio sujeto
- La angustia sería producto de un metabolismo energético que sólo puede descargarse en forma de angustia
- La angustia queda libre, flotante y no encuentra una ligadura que la represente a través del lenguaje
- En el ataque de angustia, de esta neurosis, algo de la mediatización imaginaria se relaciona con lo real de esta manera únicamente
Otra óptica: El Ataque de Pánico desde un Manual Diagnóstico (DSM-IV)
El ataque de pánico es entonces una categoría diagnóstica incluida por la Asociación Americana de Psiquiatras (APA) en 1980, en el Manual de desórdenes Mentales (DSM III), y extendido en el DSM IV hacia 1994.
Antes, la Organización Mundial de la Salud (OMS), planteó en 1997, que el planeta asiste a una “catástrofe epidemiológica”, en dónde el 12% de las causas de enfermedad son desordenes mentales.
Características diagnósticas de la crisis de angustia – ataque de pánico en Costa Rica (o panic attack)
(…) La característica principal de una crisis de angustia es la aparición aislada y temporal de miedo o malestar de carácter intenso, que se acompaña de al menos 4 de un total de 13 síntomas somáticos o cognoscitivos. La crisis se inicia de forma brusca y alcanza su máxima expresión con rapidez (habitualmente en 10 minutos o menos), acompañándose a menudo de una sensación de peligro o de muerte inminente y de una urgente necesidad de escapar. Los 13 síntomas somáticos o cognoscitivos vienen constituidos por: palpitaciones, sudoración, temblores o sacudidas, sensación de falta de aliento o ahogo, sensación de atragantarse, opresión o malestar torácicos, náuseas o molestias abdominales, inestabilidad o marco (aturdimiento), desrealización o despersonalización, miedo a perder el control o «volverse loco», miedo a morir, parestesias y escalofríos o sofocaciones (…)
Los individuos que solicitan ayuda en una consulta psicológica o terapéutica por estas crisis de angustia – ataque de pánico en Costa Rica- acostumbran describir el miedo como intenso y llegan a relatar cómo en aquel momento creían estar a punto de morir, perder el control, tener un infarto, un accidente vascular cerebral o «volverse locos».
Describen asimismo el urgente deseo de huir del lugar donde ha aparecido la crisis. Al ir repitiéndose, estas crisis pueden presentar un menor componente de miedo. teniendo en cuenta que la persona ya reconoce la sintomatología, y se da cuenta de que aunque sus sensaciones estén alteradas, no representan un peligro real, debido al contraste que se hace con las primeras experiencias.
La falta de aire constituye un síntoma frecuente en las crisis de angustia asociadas al trastorno de angustia con y sin agorafobia y la ansiedad característica de las crisis de angustia puede diferenciarse de la ansiedad generalizada por su naturaleza que es intermitente, prácticamente paroxística, y su característica es de gran intensidad.
Las crisis de angustia o el Ataque de Pánico en Costa Rica, puede aparecer en una amplia gama de trastornos de ansiedad (p. ej., trastorno de angustia, fobia social, fobia específica, trastorno por estrés postraumático, trastorno por estrés agudo). Así, al determinar la importancia de la crisis de angustia en el diagnóstico diferencial de todos estos trastornos, es necesario considerar el contexto en que ésta aparece.
Criterios para el diagnóstico de crisis de angustia (panic attack)
Teniendo en cuentas las características del Ataque de Pánico en Costa Rica, es preciso recordar que la aparición temporal y aislada de miedo o malestar intenso, es acompañada de cuatro (o más) de los siguientes síntomas, que se inician bruscamente y alcanzan su máxima expresión en los primeros 10 minutos:
- Palpitaciones, sacudidas del corazón o elevación de la frecuencia cardiaca
- Sudoración,
- Temblores o sacudidas
- Sensación de ahogo o falta de aliento
- Sensación de atragantarse
- Opresión o malestar torácico
- Náuseas o molestias abdominales
- Inestabilidad, mareo o desmayo
- Desrealización (sensación de irrealidad) o despersonalización (estar separado de uno mismo)
- Miedo a perder el control o volverse “loco”,
- Miedo a morir
- Parestesias (sensación de entumecimiento u hormigueo),
- Escalofríos o sofocaciones
Entonces, la característica esencial del trastorno de angustia es la presencia de crisis de angustia recidivantes e inesperadas, seguidas de la aparición, durante un período como mínimo de un mes, de preocupaciones persistentes por la posibilidad de padecer nuevas crisis de angustia y por sus posibles implicaciones o consecuencias.
Para efectuar el diagnóstico de trastorno de angustia se requiere haber presentado por lo menos dos crisis de angustia inesperadas, si bien la mayoría de los casos, se refiere haber padecido un número considerablemente mayor, donde la frecuencia y gravedad de las crisis de angustia varían ampliamente.
También es preciso tener en cuenta que el diagnóstico asociado al Ataque de Pánico en Costa Rica, debe ser realizado por un profesional competente, y su tratamiento debe ser dirigido por un profesional en psicología.
Comparaciones sobre las 2 concepciones
Es fácil deducir que las observaciones de este “mal”, ya habrían sido descritas por Freud en 1894, al ser prácticamente una copia, lo que llevará a preguntarnos ¿por qué actualmente esta propuesto como una cuestión novedosa?.
Lo anterior, merece algunas consideraciones, teniendo en cuenta que después de leer el DSM IV, se observa un amplio espectro de posibilidades abiertas, radicales, muy poco definibles y bastantes inciertas que generan el mismo pánico que se intentaría otrora aplacar; señalando a la vez una endeble argumentación diagnóstica que la sustenta y la difusión facilitada a través de etiquetas hacia el público en general.
De este modo la conceptualización en torno al Ataque de Pánico en Costa Rica, debe estar sustentada en otros aportes teóricos importantes.
Otros ejes fundamentales del concepto de angustia
El texto de Inhibición, síntoma y angustia es casi la culminación freudiana del tratamiento del tema, lo cual continuará Lacan en el Seminario X (de La angustia). Ambos textos son piedras angulares de la obra de ambos autores, abordan cuestiones complejas y replantean –cada uno en su tiempo- problemas de fondo para la clínica. Desde luego aquí no se detiene y siempre se encuentran nuevas referencias y desarrollos que aportan al planteo central de la teoría de la angustia.
Esquemáticamente y con el objeto de opinar sobre el denominado “ataque de panico”, sintéticamente se delinea algunos conceptos cruciales desde el ámbito psicoanalítico:
- La angustia es un estado afectivo displacentero, pero no siempre ese estado displacentero es angustia.
- La angustia es angustia de castración (y con la angustia se revela la amenaza de la castración).
- La angustia tiene un rasgo especial y no es fácil de determinar, aparecen sensaciones físicas con aumento de excitación que tiene sentido creciente lo cual le adjudica ese carácter de displacer.
- Esta excitación en crecimiento necesita acciones de descarga y esto generalmente toma las respuestas motoras, esto es a lo que generalmente se le llama “ataque de pánico”.
- No puede confundirse la angustia con un síntoma (ha callar), cuestión que está planteada en el DSM-IV, en ese caso se tomará el camino de sintomatizar la angustia lo que nos lleva al “desorden de pánico” (temor permanente a un ataque de angustia).
- El síntoma está al servicio del síntoma, permite eludirla (beneficio primario). Los síntomas son creados para evitar la situación peligrosa que la angustia señala (algo de la castración en el Otro con mayúscula).
- Una fuga, ante situación displacentera por un peligro externo, permite eludir la situación, pero ante los peligros internos, aquellos que provienen del interior se manifiestan con angustia.
- La angustia no es ninguna sustitución, es una señal.
Reflexiones finales sobre los ataques de angustia o ataque de pánico en Costa Rica
- La psiquiatría norteamericana es un discurso de poder (Amo) y como tal ha de manifestarse en ese orden y no en otro, lo contrario sería ilógico.
- El discurso es básicamente médico, un discurso del saber y del poder (en los dos sentidos). Es positivista, experimentalista, cognitivista y pragmático, colocando al Ser Humano en la posición de Robot al cual se le podría medir sistemáticamente.
- La eficiencia en el cierre de síntomas es su objetivo. El cuerpo es un organismo al cual hay que curar eficiente y lógicamente de acuerdo al pensamiento único de sus propios manuales.
- Sumamos a esto el concepto médico de cura: suprimir el síntoma y que la medicina se ocupa de las enfermedades, no del paciente. A nuestro entender: taponar el síntoma (que en realidad nos habla), porque mientras el circuito de la palabra este cortado, el paciente nunca se apoderará de las cosas que le suceden.
- Tomado de tal forma, la angustia está pensada como un fenómeno patológico, pero no como un fenómeno necesario en una estructura neurótica, un afecto que irrumpe balizando la subjetividad y que requiere más palabras.
- El público también aparece sin más reflexión que una revista o un diario, pero el neurótico siempre intentará relevar su responsabilidad ante el deseo propio y “es mejor que me digan lo que tengo como enfermedad, que me ponga a revisar por qué me pasa esto”. Un encastre perfecto de uno y de otro lado.
- En fin, se sintomatiza la angustia al considerarse el pánico/angustia como un síntoma, sin serlo en realidad.
A partir de lo anterior, el paciente que padeció el ataque de angustia y no logró ponerlo en palabras, está pendiente -como la espada de Damocles sobre su cabeza- que esto le ocurra nuevamente, con lo cual siempre está con una vigilia de pastilla en mano.
Esto sería el concepto de militarización medicamentosa:
“hace lo que el Otro te ordenó (toma la pastillita) porque él (Otro/Amo) sí que sabe, y si desobedeces te sobrevendrá el castigo del Amo” (ese que sabe siempre lo que hay que hacer para que las cosas funcionen).
Tratamiento para el Ataque de Pánico en Costa Rica (angustia)
Desde ya, se le debe explicar al paciente con palabras sencillas, que las descargas de pánico o los “auras”, se pueden controlar, si se tienen en cuenta:
- Los desencadenantes psicológicos, como la sobreexigencia, el estrés y los conflictos intrapsíquicos, y
- Los desencadenantes físicos, como por ejemplo el exceso de actividad corporal y el consumo de bebidas, dependencias o medicamentos de características ansiogénicas.

Este trastorno – Ataque de pánico en Costa Rica – tiende a evolucionar hacia estadios de comorbilidad como la hipocondría y/o la depresión. Donde el tratamiento psicofarmacológico es efectivo, pero en más del 60% su diagnóstico se presta a confusión y en otro 36% los pacientes presentan depresión y dependencia.
Además podremos preguntar: “¿Qué cosa cree que no funciona en su vida?”, o “Esto que le pasa ¿usted cree que lo puede relacionar con algo particular de su vida?”. Es decir, algún camino que permita relacionar su historia, al suceso de la angustia para darnos la posibilidad de rescatar la subjetividad.
En este punto nos encontramos con un detalle de mayor resonancia en el tratamiento de la angustia y en el diagnóstico diferencial, a saber: ¿quién pregunta y desde dónde?.
Lo importante, sobre todo, es tender los puentes del tiempo y deshacer la urgencia, permitiendo armar una escena relacionada aunque sea ingenua. Así, mientras el paciente pueda hablar tendrá la posibilidad de adueñarse de aquello que posiblemente lo angustie.
Por tanto, debemos trabajar sobre la posibilidad de tramitar metafóricamente la angustia para que tenga, así, efectos simbólicos. No es lo mismo preguntar acerca de los antecedente familiares, educarlo psicofarmacológicamente para prevenir un nuevo “ataque” de angustia, que intentar alojar esa angustia de muerte en una transferencia.
Por su parte, el DSM dirá que:
“Resulta de sumo interés la vinculación entre el pánico y los eventos traumáticos. Un trauma significativo, a edad temprana -antes de los cinco años- es capaz de alterar dramáticamente el patrón de respuesta neurobiológica de un sujeto”. Lo cual no debe hacerse ya que no se lograría trabajar sobre la angustia, ni sus ataques.
Así, el DSM IV tiene descripciones cuantificadas y cuantificables, donde asigna etiquetas a interesados en la frecuencia y en la permanencia de perturbaciones y sin embargo, se carece de fundamentación teórica psicopatológica.
De igual forma, no dice nada acerca de la etiología, y especula con una amplia variedad de causas observables de conductas humanas, posiblidades psicobiológicas, endócrinas, etc., interpretadas desde una concepción ideológica y filosófica; reiterando lo que conocemos de la psiquiatría: una clínica de mirada, pero sin explicaciones psicopatológicas.
Por último, se intentaría cortar el síntoma con medicación inmediata, sin tratamiento, ni intermediación de la palabra, acariciando un viejo anhelo:
“explicarlo mediante la neuroquímica y extraerla del terreno de lo anímico para ser única propiedad de un discurso amo”.
Fuente: Parafraseado del Psicoanalista, Docente y Director de Ediciones El Øtro.
Contacto: Email: jmendez@comnet.com.ar,
https://www.jotamendez.blogspot.com.
Subrayados, tabulaciones especiales de párrafos y letras resaltadas tienen el fin de enfatizar el artículo.
¿Cómo ayudar a alguien durante un Ataque de Pánico en Costa Rica?

Como te contamos hace unos párrafos, cuando una persona tiene un Ataque de Pánico en Costa Rica, siente que va a morir o que algo fatal va a suceder en cualquier momento. Es por esto que presenciar una crisis de angustia, no solo es angustiante para quien la padece, sino que puede resultar bastante atemorizante para quienes están cerca de la persona.
Teniendo en cuenta que nadie está exento de sufrir un Ataque de Pánico, queremos contarte cómo ayudar a alguien que se encuentra en medio de una crisis de angustia.
Lo primero que debes tener en cuenta es que el nivel de ansiedad de la persona va a subir niveles considerables, y es necesario mantener la calma, además de eso, aplicar los siguientes consejos le ayudará a sobrellevar el episodio del mejor modo posible:
- Manténgase cerca de la persona: Dejar sola a una persona en este estado, puede generar más pánico y hacer que los síntomas aumenten, por eso lo ideal es que además de estar calmado, la persona sienta que puede contar con usted en este momento difícil.
- Lleve a la persona a un lugar tranquilo: Lo mejor que puede hacer es llevar a la persona a un lugar donde no tenga muchos estímulos que puedan angustiarla más. Lo ideal es elegir un espacio con buena ventilación y lejos de ruidos aturdidores.
- Pregúntele que siente: Lo mejor que puede hacer es dejar que la persona se exprese, si usted empieza a suponer y a llenarla de información, lo más probable es que se sienta abrumada y los síntomas aumenten.
- Hable con frases cortas y sencillas: La idea es que la persona tenga la menor sobreestimulación posible, por eso lo mejor que puede hacer es usar frases cortas, que no se presten para interpretaciones ambiguas, y además es importante que tengas un tono tranquilizador.
- Evite sorprender: En medio de un ataque de pánico, lo menos que queremos es sorprender desagradablemente a la persona.Así que, evite movimientos bruscos o presentar otros estímulos que puedan alterar la situación.
- Proponga ejercicios de respiración: Ayudar a controlar la respiración de la persona, puede ser un total acierto para que los síntomas disminuyan, de este modo,invítelo a hacer ejercicios de respiración, respire con él, inhalando y exhalando profundamente, esto puede traer una sensación de alivio y los síntomas irán disminuyendo.
- Evite juzgar a la persona: Lo mejor en estos casos es tener empatía y no juzgar a la persona por medio de frases como: “Te estás volviendo loca” o “nada de lo que dices es cierto”, pues son detonantes que pueden hacer que la persona entre en un estado de confusión, y su nivel de alteración aumente.
- Busque traer la atención al presente: Las técnicas de Mindfulness son una excelente herramienta para afrontar un Ataque de Pánico en Costa Rica. La idea es proponer ejercicios simples que devuelvan a la persona al presente como mirar un objeto detalladamente o hacer ejercicios como levantar las manos por encima de la cabeza. Esto es vital, teniendo en cuenta que en medio de una crisis de angustia la mente es nuestro peor enemigo y es allí donde los pensamientos se desbordan, creando los escenarios catastróficos.
- Invite a la persona a caminar: Si se encuentra en un lugar tranquilo, puede invitar a la persona a caminar, el aire fresco y el movimiento puede hacer que la persona se calme paulatinamente. En el caso de lugares con mucho tráfico y ruido exterior, lo más recomendable es quedarse en un espacio con pocos estímulos.
- Use palabras tranquilizadoras: Hacer consciente a la persona de que no está sucediendo nada malo, puede ser una técnica excelente para ayudarle a salir de su Ataque de Pánico. Frases como: “Esto lo vas a superar”, “Lo estás haciendo bien”, “Recuerda que nada malo está sucediendo, es tu mente” o “Puedes sentir miedo, pero recuerda que esta situación no representa un peligro para ti”, pueden ser atenuantes que ayuden a que la persona vaya recobrando su seguridad.
Estas técnicas son sencillas, pero pueden ayudar a que la persona se sienta apoyada y poco a poco regrese al presente. Después de atravesar el episodio, puede recordarle que la apoya y está allí para ella, y recomendarle que lo mejor es buscar ayuda psicológica, para que pueda trabajar los síntomas que lo desestabilizan.
En el Grupo Poïesis tenemos un equipo interdisciplinario de psicólogos, especializados en abordar el Ataque de Pánico en Costa Rica.
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¿Qué es el Trastorno de PÁNICO? síntomas y tratamiento
Documental: Trastorno de ansiedad, Agorafobia, Fobias. Ataque de Pánico (1/5)
Bibliografía consultada sobre el Ataque de Pánico en Costa Rica
- Jacques Lacan. Seminario X . La Angustia.
- Sigmund Freud. Obras Completas. Tomo III. Amorrrortu editores.
- Manuscrito E,
- Sobre la justificación de separar de la neurastenia un determinado síndrome en calidad de “neurosis de angustia”
- La interpretación de los sueños:
- Tres ensayos de teoría sexual
- Proyecto de psicología
- La represión
- Lo inconsciente
- Conferencia 25
- Inhibición, síntoma y angustia
- Conferencia 32
- DSM IV. (Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales)
- Emmanuel Todd. La ilusión económica. Sobre el estancamiento de las sociedades desarrolladas. Editorial Taurus. 1999
- Alfredo Eric Calcáneo y Eric Calcáneo. Argentina. Derrumbe neoliberal y proyecto nacional. Editorial “el Diplo” de Le Monde Diplomatic. 2003.
- Un mundo mejor es posible. Autores Varios. Editorial “el Diplo” de Le Monde Diplomatic
- La angustia, su razón estructural y sus modalidades clínicas. Autores varios. Compiladora Patricia Ramos.
Fecha e Actualización: 20 de Abril del 2022, KA