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En la actualidad, es común encontrar términos psicológicos mal usados en distintos ámbitos, gracias al constante flujo de información especializada en internet. Muchas personas utilizan estas palabras sin entender su verdadero significado o contexto, lo que puede llevar a confusiones y malinterpretaciones.
Además, algunas veces estos términos son utilizados de manera inapropiada en medios de comunicación y redes sociales, lo que puede llevar a una propagación de información errónea.
Es importante tener en cuenta que la psicología es una ciencia compleja y precisa, por lo que es necesario comprender adecuadamente los términos psicológicos para utilizarlos de manera adecuada y evitar malentendidos o malinterpretaciones.
Gaslighting, narcisista, deprimido o trauma, son algunos de los ejemplos de términos psicológicos mal usados, y en los que vamos a profundizar a continuación.
Términos psicológicos mal usados en la actualidad
Términos psicológicos mal usados como Ghosting, Gaslighting o trauma, han sido utilizados en la disciplina psicológico durante décadas. No obstante, en la actualidad hay una proliferación de dicha terminología en redes sociales, lo que no solo puede generar malas interpretaciones de los conceptos, sino que incluso puede minimizar el sentido de los mismos, desligándolos de su contexto patológico y dañino para la salud mental.

Es muy común escuchar expresiones como: “Tu actitud me dio depresión”, esta es una manera de maximizar un conjunto de emociones, sin embargo, la depresión es un cuadro patológico en el que la persona pierde la motivación frente a la vida, y experimenta un estado prolongado de tristeza durante de meses. Tal vez este sea un ejemplo exagerado, teniendo en cuenta que el español es una lengua que tiende a maximizar las emociones en el discurso, no obstante, existen términos como “Narcisista” que andan en boca de todo el mundo y pueden resultar bastante peligrosos.
Aclarando esto, a continuación te damos algunos ejemplos de términos psicológicos mal usados en la actualidad:
Gaslighting
Gaslighting, es tal vez uno de los términos psicológicos mal usados, más importantes del momento. El término es usado indistintamente para referirse a situaciones en los que una persona actúa de modo insensible, dice una mentira o simplemente tiene una opinión diferente. Aunque estas situaciones sean incómodas y pueden generar malestar, la verdad es que el Gaslighting es otra cosa.
El gaslighting es una forma de manipulación psicológica en la que una persona busca minar la confianza y la percepción de la realidad de otra persona. El término se originó a partir de la obra de teatro “Gas Light” de 1938, en la que el personaje principal intenta hacer creer a su esposa que está loca al manipular su entorno para que las luces parpadeen de manera irregular (y negar que esté sucediendo) y hacer que objetos desaparezcan y luego reaparezcan.

En la actualidad, el gaslighting se refiere a un patrón de comportamiento en el que una persona manipula a otra para que cuestione su propia percepción de la realidad y su cordura. Puede involucrar mentiras, negación de hechos, distorsión de la verdad y la realidad, minimización de las preocupaciones de la persona afectada, aislamiento social, entre otros comportamientos. Esta forma de manipulación puede tener consecuencias negativas en la salud mental de la persona afectada, como ansiedad, depresión y estrés postraumático.
Traumatizado
Otro te los términos psicológicos mal usados en la actualidad, es “Trauma”. Es ampliamente común escuchar expresiones como: “¿Te dejó el bus antes de una reunión importante? ¡Qué trauma! Y aunque esto desde una lectura simple puede parecer un uso del lenguaje expresivo, la realidad es otra y tiene que ver con que el trauma es algo mucho más profundo que afecta la vida cotidiana de una persona.
Un trauma no es algo que no salió como querías, o que te generó frustración o incomodidad. El trauma se refiere a una experiencia abrumadora, dolorosa y perturbadora que puede tener un impacto negativo en la salud mental y emocional de una persona. Puede ocurrir como resultado de un evento singular o de una serie de eventos que superan la capacidad de la persona para hacer frente y pueden incluir eventos como abuso, violencia, accidentes graves, desastres naturales, experiencias de guerra, entre otros.
Las personas que experimentan un trauma pueden experimentar síntomas como flashbacks, pesadillas, evitación de situaciones asociadas con el trauma, cambios en el estado de ánimo y emociones, dificultad para concentrarse, sensación de aislamiento, entre otros. Estos síntomas pueden tener un impacto significativo en la vida de la persona afectada y en sus relaciones interpersonales, por lo que dentro de los términos psicológicos mal usados, debíamos incluir esta palabra.

Es importante tener en cuenta que la respuesta al trauma varía de persona a persona y que no todas las personas que experimentan un evento traumático desarrollan un trastorno de estrés postraumático (TEPT) u otros problemas de salud mental. Sin embargo, cuando los síntomas del trauma persisten y afectan negativamente la vida de la persona, es importante buscar ayuda profesional para manejar el impacto emocional del evento traumático y mejorar la calidad de vida.
Triggered
Triggered es otro de anglicismos que hacen parte de los términos psicológicos mal usados. Normalmente la gente usa esta expresión para decir que alguien actúa fuera de la normalidad y se ha convertido en una forma de manifestar el disgusto, descontento u ofensa, sin embargo, este no es el uso adecuado y a continuación de contamos porqué.
El término “triggered” proviene del inglés y se utiliza comúnmente para describir una reacción emocional intensa a algo que desencadena un recuerdo o trauma en una persona. La persona puede sentirse emocionalmente abrumada, ansiosa, angustiada o enojada debido a este desencadenante.
Por ejemplo, una persona que ha sufrido un ataque sexual puede ser “triggered” por una escena de abuso en una película o frente a un comentario insensible sobre el abuso sexual. En este caso, la escena o el comentario pueden actuar como un “desencadenante” que activa los recuerdos traumáticos de la persona y provoca una reacción emocional intensa.

Es importante tener en cuenta que el término “triggered” también se ha utilizado de manera inapropiada en algunas situaciones para minimizar o burlarse de las reacciones emocionales de las personas. Es esencial respetar y validar las respuestas emocionales de las personas a los eventos y situaciones que puedan ser desencadenantes para ellas.
Narcisista
Narcisista es sin duda, uno de los términos psicológicos mal usados en internet, con mayor número de fanáticos. Lo usan indistintamente para referirse a personas que recurren a prácticas como el Ghosting o incluso en casos de rupturas sentimentales o en aquellas situaciones en la que una persona tiene actitudes que no le gustan a otros.
Sin embargo, más allá de tener una alta valía de sí mismo, un narcisista es una persona que muestra un patrón de comportamiento que se caracteriza por la búsqueda constante de admiración y atención, una autoestima exageradamente elevada y falta de empatía hacia los demás. El término se deriva de la figura mitológica de Narciso, quien se enamoró de su propia imagen reflejada en el agua.
Los narcisistas suelen tener una gran necesidad de controlar a las personas y las situaciones a su alrededor, y pueden ser manipuladores e insensibles a los sentimientos y necesidades de los demás. También pueden tener dificultades para aceptar críticas o para reconocer sus errores, ya que su autoimagen se basa en una percepción idealizada de sí mismos.
El trastorno de personalidad narcisista es una condición psicológica en la que estos rasgos son muy pronunciados y afectan significativamente la vida de la persona. Algunos de los síntomas del trastorno narcisista incluyen la creencia de que uno es especial o superior a los demás, la necesidad constante de admiración, la falta de empatía hacia los demás, la explotación de los demás para obtener beneficios personales, entre otros.

Es importante tener en cuenta que no todas las personas que presentan algunos de estos rasgos son necesariamente narcisistas o tienen un trastorno narcisista de la personalidad. El diagnóstico de un trastorno de personalidad debe ser realizado por un profesional de la salud mental capacitado en la evaluación de estas condiciones.
Love-Bombing
En la actualidad uno de los términos psicológicos mal usados es el “Love-Bombing” La gente lo usa para referirse a una situación en la que una persona trata de conquistar a otra a través de gran cantidad de elogios, regalos, presentes, y otras formas de ganarse su afecto.
Love bombing es una táctica de manipulación emocional utilizada por algunas personas, especialmente en relaciones románticas. Consiste en abrumar a la otra persona con una sobrecarga de atención, afecto, regalos y cumplidos exagerados, en un esfuerzo por ganar su confianza y lealtad.
La idea detrás del love bombing es hacer sentir a la otra persona tan especial y amada que se sienta emocionalmente dependiente del perpetrador. Una vez que la víctima se siente completamente enamorada y segura en la relación, el perpetrador puede empezar a ejercer control y manipular a la víctima a su antojo.

A menudo, el “love bombing” es una táctica de seducción utilizada por narcisistas y manipuladores emocionales para controlar a su pareja o para atraer a nuevas víctimas en sus redes. Por otro lado, el love bombing también se puede dar como modo de compensar conductas abusivas. Por ejemplo: La persona primero te lastima y luego te hace un regalo con el fin de que olvides los efectos de sus comportamientos abusivos.
Tóxico
La palabra tóxico, tal vez sea uno de los términos psicológicos mal usados con más auge en la actualidad. Hablamos de relaciones tóxicas, de personas tóxicas, entornos tóxicos e incluso de positivismo tóxico… no obstante, el término se usa tan indistintamente que hoy por hoy se cataloga como tóxica a cualquier persona que genere la más mínima incomodidad en otra persona.
El asunto, sin embargo, es mucho más profundo. Hablamos de personas tóxicas, cuando son seres que causan daño emocional o psicológico a otros de modo intencional, o que desarrollan patrones tóxicos en las relaciones que se vuelven herramientas de relacionamiento habitual.
Usar esta etiqueta a la ligera puede generar mucho daño, pues en muchos casos se usa para desresponsabilizarse de conductas propias dentro de las relaciones.
Grooming
El término Grooming es una bomba en la actualidad, se usa indistintamente para referirse a cualquier persona que tenga un vínculo con alguien menor, y de hecho en muchos casos es acuñado para deslegitimar muchos procesos de la comunidad LGBTQ.

Sin embargo, el grooming es una técnica utilizada por algunos adultos para ganar la confianza de menores de edad, con el fin de abusar sexualmente de ellos o involucrarlos en conductas sexuales inapropiadas. El grooming puede ser realizado en persona o a través de internet, y es una forma de manipulación psicológica y emocional.
El proceso de grooming comienza con el establecimiento de una relación de confianza entre el adulto y el menor, a menudo a través de regalos, cumplidos, atención y apoyo emocional. El perpetrador también puede buscar información personal sobre el menor, para utilizarla en su beneficio. Una vez que se ha establecido una relación de confianza, el perpetrador puede empezar a introducir temas sexuales y a normalizar la conducta inapropiada.
Es importante tener en cuenta que el grooming puede ser un proceso largo y gradual, y que puede ser difícil de detectar, tanto para los menores de edad como para sus padres o cuidadores. Por ello, es importante educar a los menores sobre la seguridad en línea y establecer reglas claras para el uso de internet y las redes sociales. También es importante estar alerta ante cualquier comportamiento sospechoso por parte de adultos que interactúen con menores.
Vínculo traumático
Dentro de los términos psicológicos mal usados, las personas suelen hablar de un vínculo traumático cuando dos personas comparten sus experiencias traumáticas. Sin embargo, nada más lejano de la realidad.

El vínculo traumático se refiere específicamente a la conexión o apego que siente una persona por su abusador o por la persona que le ha hecho vivir experiencias traumáticas. El vínculo traumático también puede ser negativo y disfuncional, especialmente cuando se trata de relaciones abusivas. Por ejemplo, una persona que ha experimentado abuso por parte de un padre puede desarrollar un vínculo traumático con su abusador y puede ser propensa a entrar en relaciones abusivas en el futuro.
En general, el vínculo traumático puede ser muy poderoso y difícil de romper. Es importante buscar ayuda psicológica si se está lidiando con un vínculo traumático disfuncional.
Antisocial
Dentro de los términos psicológicos mal usados, “Antisocial” se lleva uno de los primeros lugares, pues suele usarse desprevenidamente en situaciones casuales como no querer ir a una fiesta. Es común escuchar que las personas dicen: “No me apetece ir, es que soy muy antisocial” sin saber lo que están diciendo realmente.
En términos generales, se puede decir que alguien antisocial es una persona que no se adapta a las normas sociales, que viola los derechos de los demás y que no muestra remordimiento o empatía por sus acciones.
Sin embargo, el término “antisocial” también se utiliza de manera más específica para referirse al trastorno de personalidad antisocial (TPA), también conocido como sociopatía o psicopatía. Las personas con TPA tienen un patrón persistente de comportamiento irresponsable, impulsivo y a menudo ilegal. A menudo, estas personas engañan, manipulan y explotan a los demás para su propio beneficio y no muestran remordimiento por sus acciones.

Es importante tener en cuenta que no todas las personas que tienen comportamientos antisociales tienen un trastorno de personalidad antisocial. Algunas personas pueden tener problemas de conducta o problemas emocionales que los llevan a comportarse de manera antisocial. Además, es importante no confundir el término “antisocial” con el término “asocial”, que se refiere a personas que prefieren estar solas o que tienen dificultades para interactuar socialmente.
Descarga de trauma
Dentro de los términos psicológicos mal usados, está la expresión “descarga de trauma” que se ha popularizado en redes sociales, aludiendo a la experiencia de contar detalles de experiencias traumáticas, aunque al interlocutor no le interese, no esté preparado para escuchar o simplemente no tenga las herramientas para ayudar a que la persona pueda tramitar la información.
La descarga de trauma es un proceso terapéutico que se utiliza para ayudar a las personas a liberar y procesar las emociones y sensaciones físicas que están atrapadas en su cuerpo como resultado de un evento traumático. El objetivo de la descarga de trauma es ayudar a la persona a liberar la energía y las emociones reprimidas que han quedado atrapadas en su cuerpo como resultado del trauma.
La descarga de trauma puede involucrar diferentes técnicas terapéuticas, como la terapia corporal, la terapia de exposición y la terapia cognitivo-conductual. Algunas de las técnicas utilizadas en la descarga de trauma incluyen la respiración profunda, el movimiento corporal, la meditación, la visualización y el diálogo interno.

En general, la descarga de trauma puede ser un proceso intenso y emotivo, y puede tomar tiempo y esfuerzo para lograr una descarga completa. Es importante trabajar con un terapeuta capacitado y experimentado en el tratamiento del trauma para garantizar que se esté siguiendo un proceso terapéutico seguro y efectivo.
En conclusión, es importante tener en cuenta que los términos psicológicos mal usados pueden ser dañinos para la salud mental y emocional de las personas.
Utilizar términos psicológicos mal usados, como “psicópata”, “maníaco”, “antisocial” o “trastornado” de manera inapropiada puede contribuir a estigmatizar a las personas que luchan con problemas emocionales o de salud mental. Además, el uso incorrecto de estos términos puede crear confusiones y malentendidos en la comunicación entre profesionales de la salud mental y pacientes, y entre las personas en general. Es importante utilizar términos psicológicos con precisión y responsabilidad, y buscar información precisa y actualizada sobre los términos que se utilizan en la salud mental para asegurar que se están utilizando de manera apropiada.
Si consideras que tienes alguna de las conductas o trastornos que hemos mencionado en este artículo sobre Términos Psicológicos mal usados, y sientes que estás luchando con problemas emocionales o de salud mental, te recomendamos que busques ayuda. La buena noticia es que hay muchos profesionales de la salud mental capacitados y experimentados que pueden ayudarte a superar estos desafíos.
Si necesitas hablar con un psicólogo, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Tenemos una red de profesionales de la salud mental altamente capacitados y experimentados que pueden ayudarte a abordar cualquier problema emocional o de salud mental que puedas estar experimentando. Ya sea que necesites ayuda para tratar la ansiedad, la depresión, el estrés, el trauma o cualquier otro problema emocional o psicológico, podemos conectarte con un psicólogo que pueda ayudarte a superar tus desafíos y mejorar tu bienestar emocional.
Recuerda que no estás solo en tu lucha contra los problemas emocionales o de salud mental. Buscar ayuda es un paso valiente y significativo hacia la curación y el bienestar emocional. Si sientes que necesitas ayuda, no dudes en ponerte en contacto con nosotros para que podamos ayudarte a encontrar el apoyo que necesitas.
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Fecha de actualización: (10 Abril 2023 KA)